Quilmes: familiares de un nene con convulsiones agredieron a médicos luego de que demoraran en atenderlo por el «protocolo COVID-19»
Un episodio de violencia se desató en la madrugada del sábado en el Hospital Iriarte de Quilmes, después de que un grupo de personas que había ingresado por guardia con un chico que había sufrido convulsiones reclamara a los gritos y patadas que lo atendieran.
Al parecer, los familiares del paciente consideraron que los médicos demoraban mucho tiempo en prepararse para atenderlos cumpliendo con el protocolo que rige por la pandemia de coronavirus y en lugar de seguir esperando rompieron a patadas la puerta que los separaba.
«Nada justifica la violencia», expresó esta mañana en TN el director del hospital, Juan Fragomeno (M.P.27069), quien remarcó que los agresores corrieron a los médicos y a las enfermeras con la intención de pegarles y que los profesionales «tuvieron que esconderse en una habitación».
Si bien el doctor aclaró que no estuvo presente durante la agresión, precisó que el nene tenía unos cuatro años y que presentaba un estado «post-convulsivo». «Los familiares llegaron nerviosos», subrayó Fragomeno, y tras el incidente se retiraron también sin siquiera permitir que el chico recibiera asistencia.
«Rompieron puertas, tiraron sillas y se retiraron», relató el director sobre la violenta secuencia que dejó las consecuencias a la vista. Pero a pesar del mal momento, también señaló que no hubo lesiones físicas: «Solamente el shock por la agresión».
Por otra parte, Fragomeno insistió en que estas agresiones son comunes en los hospitales y reforzó la necesidad de mejorar la seguridad de los trabajadores. En abril de este año en el mismo centro médico, tras un intento de robo y tiroteo, un hombre y un policía resultaron heridos. Un vecino llegó a bordo de su moto, con un balazo en una pierna y pidiendo auxilio para escapar de dos motochorros.